Episcopado condena atentado a miembros de la Iglesia en el Cauca
“Lo ocurrido es el reflejo de las heridas de toda la sociedad civil del Cauca”, dicen los obispos reunidos en la Conferencia Episcopal.
La Conferencia Episcopal de Colombia condenó el ataque armado de que fueron víctimas en la madrugada del domingo el diácono Fredy Muñoz y el laico Eider Bototo, cuando se transportaban en un vehículo de la iglesia en Caldono (Cauca).
“Rechazamos con vehemencia este atentado. Este ataque da cuenta de la degradación del conflicto en ese territorio”, declaró monseñor Ómar Alberto Sánchez, vicepresidente de la Conferencia y arzobispo de Popayán.
Según el jerarca religioso, de milagros las lesiones que sufrieron estos integrantes de la Iglesia no fueron críticas y ambos se recuperan en un centro asistencial.
“Lo ocurrido es el reflejo de las heridas de toda la sociedad civil del Cauca, en la que sus habitantes son víctimas permanentes de esta violencia armada salida de todo principio de racionalidad y respeto al Derecho Internacional Humanitario", precisa la reacción.
Para finalizar, la Iglesia manifestó que mantendrán su compromiso de servir a los feligreses e hicieron un llamado a frenar la violencia.
“Pese a la situación, monseñor Ómar Sánchez ratifica el compromiso indeclinable de la Iglesia Católica colombiana con la búsqueda de la reconciliación y la paz. Cada hecho violento en nuestros territorios nos reclama mayor compromiso en este propósito; no podemos seguir postergando este profundo anhelo", puntualiza el Episcopado.